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No hay dudas de que el sueño es un factor súper importante para la salud.
Pero para ello debe cumplir dos condiciones esenciales: el tiempo que se duerme y la calidad del sueño en las noches.
Si la calidad del sueño es óptima, el tiempo puede variar dependiendo de la persona en particular. Sin embargo, aunque no sea más que a título orientativo, a la edad de cada individuo se asocia un tiempo concreto de sueño para que éste cubra las necesidades del organismo,que cambiar dependiendo de la edad.
a Fundación Nacional del Sueño de Estados Unidos ha publicado recientemente sus recomendaciones sobre el tiempo que debe dormir cada persona según su edad.
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Recién nacidos (0-3 meses): deben dormir entre 14-17 horas al día, aunque se considera como es aceptable que este tiempo pueda ser de 11 a 13 horas. Pero no sé recomienda que superen las 18 horas.
Bebés (4-11 meses): su tiempo de sueño se sitúa entre las 12 y 15 horas. No debería ser inferior a 11-13 horas, ni superar las 16 o 18 horas .
Niños pequeños (1-2 años): no deben dormir menos de 9 horas y más de 15 o 16, por lo que este caso la recomendación de tiempo de sueño diario se sitúa en el medio de ambas horas
Niños en edad preescolar (3-5 años): el tiempo ideal dedicado a dormir es de 10-13 horas, pero no debe ser inferior a 7 ni superior a 12.
Niños en edad escolar (6 a 13 años) este caso el tiempo de sueño necesario se reduce a 9-11 horas.
Adolescentes (14-17 años): lo más adecuado es que duerman de 8,5 a 10 horas diarias.
Adultos más jóvenes (18 a 25 años): su tiempo óptimo de sueño es de 7-9 horas al día.
Adultos (26-64 años): se mantiene el mismo rango de necesidades de sueño que en el caso anterior.
Adultos mayores (más de 65 años): lo más saludable para ellos es que el sueño ocupe 7-8 horas al día. Sin embargo, es frecuente que la calidad del sueño se vea reducida.
Hay otros factores como la luz, la menopausia, ansiedad, entre otros que pueden causar una dificultad para conciliar el sueño.
Por eso,en estos casos, recomendamos contactar a Unidad del sueño.